Imprimir
18/01/2014 | 09:03hs

- CULTURA

El Curupí debutó en el Cocomarola y se topó con el escándalo

La controversia en torno de la representación del Curupí en la Fiesta Nacional del Chamamé llegó a niveles paroxísticos debido a la dura crítica que recibió el cuerpo de ballet por lo explícito del atuendo utilizado para caracterizar al personaje, dotado con un extenso pene de material elástico que rodeaba la cintura del bailarín, para escándalo de las butacas más conservadoras del Cocomarola.

De inmediato las redes sociales mostraron la molestia de un amplio sector del público que consideró un exceso el miembro viril del mítico personaje, famoso justamente por sus atributos sexuales y durante largos años dueño de una mala fama endosada por las jóvenes que, con su leyenda, justificaban embarazos accidentales.
Cuenta la leyenda que el Curupí no se come niños como el Pombero ni asusta a los extraviados en el campo como  la Luz Mala. Simplemente no puede resistir la tentación de hacer suyas a la mujeres jóvenes, especialmente vírgenes, las cuales son tomadas por el mito y llevadas al monte para ser devueltas al día siguiente, por lo general en estado de gravidez.
Hoy sería tonto justificar una aventura amorosa con la leyenda del Curupí, pero en el siglo XIX y entrado el siglo XX, más de una dama de buena familia zafó de dar explicaciones con el argumento de este monstruo de las tradiciones guaraníticas que se atrevió a volver a los primeros planos en la era del matrimonio igualitario y la diversidad sexual.
Lo hizo en el escenario del anfiteatro, en la fiesta correntina por excelencia, y comprobó que no todo se acepta de buen grado en esta época de conectividad total, en una era digital donde los ordenadores y tablets muestran en sus pantallas escándalos tremendamente má graves.




Link:
https://www.lavozdecorrientes.com/notix/noticia/00398_el-curup-debut-en-el-cocomarola-y-se-top-con-el-escndalo




Powered by